Una dama entra a una farmacia y le pide al farmacéutico:
"Por favor quisiera comprar arsénico" .
Dado que el arsénico es muy tóxico y fatal, el dependiente quiso saber mas datos antes de proporcionarle la sustancia.
Y para que querría la señora comprar arsénico?
"Para matar a mi marido".
"¡Ah, caray! Pues lamentablemente para ese fin no puedo vendérselo.
La mujer sin decir palabra abre la cartera y saca una fotografía del marido haciendo el amor con la mujer del farmacéutico.
"Oh! Disculpe, no sabía que traía usted récipe!!!"
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