Un joven desempleado postula para un puesto de destapador de pocetas en el edificio de Microsoft.
El director de recursos humanos (RRHH) lo convoca, le hace pasar una entrevista y luego un test - con un chupón de los mas nuevos - y le dice:
« Joven. El cargo es tuyo. Dame tu email y te mandaré el formulario y las fecha y hora en las cuales debes presentarte al trabajo ».
El hombre, desesperado, confiesa no tener ordenador y que por lo tanto, no dispone tampoco de una dirección e-mail. El director de RRHH le dice que está muy apenado pero que si el joven no tiene email, esto significa que, virtualmente, no existe y que si no existe, evidentemente, ¡no se le puede dar el trabajo!
El hombre sale desesperado. No sabe que hacer. Solo carga unos Us$.10,00 en el bolsillo.
Se le ocurre ir al supermercado y comprar allí 10 kgs de las mejores frutas.
Compra una caja de 10kgs de fresas y sale a venderlas de puerta en puerta y, en menos de dos horas, duplica su capital. Repite la operación tres veces mas y vuelve a casa con Us$.60,00.
Se da cuenta entonces que podría sobrevivir de esta manera. Todo los días, sale más temprano y regresa mas tarde y cada día, triplica o cuadruplica su capital.
Luego compra una carreta y después una camioneta y un camioncito. Al año tiene una flotilla de vehículos y de gentes que trabajan para él. Pasan cinco años...
El hombre es dueño de una de las redes de distribución alimenticia mas importantes de Los E.E.U.U..
Piensa en su familia y decide tomarse un seguro de vida. Escoge un plan de seguro y, al final de la conversación, el asegurador le pregunta por su dirección electrónica para mandarle la proposición definitiva. El hombre le contesta que no tiene email.
« Bien raro», le dice el asegurador. « No tiene Ud. email y ¿aún así, logró Ud. construir este imperio comercial? ¡Imagínese como sería si hubiera tenido un email ! »
El hombre le contesta: “Estuviera destapando las letrinas de Microsoft”.
Conclusiones
1.- Internet no va a solucionar tu vida.
2.- Si no tienes email y trabajas bastante, te puedes volver millonario.
3.- Si recibiste este email, tienes más disposiciones naturales a ser destapador de pocetas que millonario.
¡Que tengas un buen día! Y ... ¡ni siquiera me contestes! !Que me fui a vender mis fresas...!
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